Un lugar que no debes dejar de visitar...
La Quebrada en #Acapulco La Quebrada se formó a partir de 1934, después de que se dinamitó parte del cerro y se formó un paso para llegar a los acantilados, tiene 45 metros de altura y es famosa porque desde su cima se efectúan vistosos clavados con un alto grado de dificultad y gran nivel de peligrosidad. Estos clavados son realizados por jóvenes originarios del puerto de Acapulco, sin entrenamiento profesional, hacia una poza que tiene una profundidad menor a cuatro metros. El clavadista debe calcular el momento exacto en que las olas hagan que el nivel del mar sea más alto para así evitar una muerte segura al impactar contra las rocas del fondo de la poza, situadas a poca profundidad cuando baja el nivel del mar. El espectáculo inicia con el ascenso de los clavadistas por las hendiduras naturales del acantilado, hasta llegar al punto más alto en el que se localiza su santuario. Después de su ritual religioso, el clavadista en turno se sitúa en una pequeña plata